Había un AStronomo que le gustaba todas las noches ir a ver los astros. Un día,
mientras caminaba por los campos que quedaban fuera de la ciudad, observaba
y contemplaba el cielo, cayó en un enorme pozo.
Al caer, comenzó a gritar y lamentarse. En esto pasó un hombre, quien le
preguntó como había terminado en semejante desgracia. Al conocer lo
sucedido, se limitó a decirle:
- Compañero, ¿quieres ver los astros que están en el cielo pero no ves todo
o que hay en la tierra?
Moraleja: Muchos muestra su ego asegurando poder hacer cosas sorprendentes y
maravillosas, cuando la realidad es que no pueden si quiera con las cosas ordinarias
de la vida.
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